Deuteronomio 5, 9-10
“
No te postrarás ante ellas, ni les rendirás culto º porque yo, el Señor tu Dios, soy un Dios celoso, que castigo la maldad de los padres que me aborrecen, en sus hijos, nietos y biznietos; pero con los que me aman y cumplen mis mandamientos, soy misericordioso por mil generaciones º. ”